De Pericles,
soldado, orador y hombre de Estado, hay algo importante que citar. En
un fragmento de su Oración Fúnebre dice refiriéndose a su pueblo: “
... Somos capaces de correr riesgos, pero al mismo tiempo valorarlos
de antemano. Otros son valientes por ignorancia;
y
cuando
se detienen a pensar, comienzan a sentir miedo.
|
|
Pero
el hombre a quien verdaderamente puede considerarse como bravo es
aquel que conoce mejor el significado de lo que es grato y de lo que
es terrible en la vida, y que marcha sin detenerse a enfrentarse con
lo que ha de venir”4. El texto precedente fue escrito en el
invierno del 431-430 antes de J.C., con la guerra del Peloponeso ya
comenzada. Fin de la primera entrega.
Atenas.
1985
LRC |